El Barça está helado.

Me dijo hace poco un amigo que en mi blog nunca hablo mal del Barça. Que siempre hablo mal del R.Madrid. Bueno, tal vez tenga razón. Pero el motivo no es otro que el Madrid se ha merecido esas críticas y el Barça los elogios. Pero hoy, el equipo de Pep Guardiola merece ser criticado por su lento partido. Viajaban a Kazan, era el partido más decisivo que le esperaba al Barça hasta la fecha y ...¡zas!, empate a cero y se complican la clasificación. Cierto es que el Barça depende de sí mismos y que ganando los dos partidos que restan (Inter en el Camp Nou y Dinamo en Kiev) se clasifican para Octavos de Final. Pero visto lo visto en Kazán mucho me temo que las cosas no son tan fáciles como se pintan. El partido que hoy ví ha sido uno de los peores del Barça en esta temporada. No ha existido la dinámica, ni la movilidad, ni la puntería y lo que es peor, ni el esfuerzo. La segunda parte el Barça me ha puesto de los nervios, muchas imprecisiones en los pases fáciles, un centro del campo muy estático (Yaya Touré ni corrió), y una delantera muy predecible. Jugando por el centro, intentando la jugada más difícil e insisto, lo que es peor, es que Guardiola ni se ha enterado o los jugadores no le han hecho caso. El Barça se pasó todo el partido jugando por el centro, sin utilizar apenas las bandas (excepto a veces Iniesta y Alves en el primer tiempo, pero poco.). Todos los culés que hoy vimos el partido de Kazán lo vimos. Vimos a un Barça lento en la creatividad, impreciso en la circulación de la pelota y un Messi perdidísimo. La verdad es que este Barça (ganador del Triplete) tiene que darte confianza pero viendo los dos últimos partidos (el de Osasuna y hoy el de Kazán) me empiezan a ponerme nervioso. El Inter ganó, está líder con 6 puntos, luego está el Rubin Kazan y FC Barcelona con 5 puntos y por último, Dynamo Kiev con 4. El grupo F está abiertísimo, igualado y cualquiera puede pasar. El Barça depende de sí mismo pero la verdad es yo no lo veo tan claro. Samuel Eto'o viene al Camp Nou con sed de venganza y luego otra vez al frío. Dos partidos, dos finales y dos equipos de cuatro que pasarán a Octavos de Final y yo estoy empezando a rezar que uno de ellos sea mi Barça. ¡Y yo en el Camp Nou el día del Inter!, "Que Dios me pille confesado".