Compartí lágrimas con Guardiola

Ayer, día 19 de Diciembre de 2009 (día de mi 23º aniversario), el FC Barcelona completó su año perfecto. Seis títulos en un año. La liga se ganó el 2 de Mayo con aquel mítico 2-6 en el Bernabeu, en el santuario del madridismo. Allí empezaron a ser eternos. Luego llegó la Copa del Rey en Mestalla, 1-4 al otro rey de Copas, el Athlétic Club. Pero antes de esa final, un 6 de Mayo, Iniesta clasificó al Barça para la final de Champions League. Eto'o y un testarazo de Messi con la cabeza hicieron que el Barça se coronase como el primer equipo del Siglo XXI que consigue un Triplete. Después de las vacaciones de verano, vino las dos Supercopas (Española y Europea). Y se habían conseguido 5 títulos pero faltaba uno, faltaba el que no se había conseguido jamás, el Mundial de Clubes de la FIFA. Ayer se consiguió y se hizo a lo grande. Remontando un resultado adverso. Marcando el gol del empate (1-1) en el minuto '89 cuando ya todos dabamos por perdida la final. Una gran vaselina de cabeza de 'Don' Pedro nos hizo recordar a otro 'Don', a Iniesta. Que también marcó en el último suspiro en Stamford Bridge. Todo el barcelonismo cantó ese gol como lo cantó en su día con el de Iniesta. Pedro e Iniesta, dos jugadores humildes y sencillos nos hicieron brincar de nuestros asientos y descargar toda la tensión que habíamos acumulado tras ver que se nos escapaban ambos sueños. Dos jugadores de la cantera, como Piqué que hizo el Sexto en el Bernabeu y ser tan bueno como Beckembauer, como Busquets que saltó de Tercera División a ser fijo en la Selección Española que irá en busca del Mundial a Sudáfrica, como Puyol que pasará a la historia como el capitán que más títulos alzó en un año, como Valdés que nos hizo suspirar de alivio cuando sus paradas decisivas evitaron una catástrofe, como Xavi que se está convirtiendo en legendario con sus más de 501 partidos oficiales con el Barça siendo el mejor jugador de la pasada Eurocopa 2008 y de la final de Champions 2009, como Messi que se ha convertido en el mejor jugador del mundo y que ha marcado en los momentos más importantes de este glorioso 2009. La cantera ha sido la clave de este Barça de leyenda, de este Barça de las 6 Copas, de este Barça que nunca en la historia lo olvidaremos. Pero hay alguien que es más importante que ellos, ese es Josep Guardiola i Sala. Un fantástico jugador en su época y hoy en día, el hombre más importante de la larga historia del FC Barcelona. Si como jugador fue un grandísimo señor como entrenador ha pasado a la leyenda del fútbol y de la historia de este deporte. Ayer, cuando el Barça ya era campeón del mundo, instantes antes de ir a recoger el trofeo del Mundial de Clubes, Guardiola rompió a llorar en el centro del campo, unas lágrimas sinceras, unas lágrimas de alegría, unas lágrimas que reflejan que ha estado mucho tiempo trabajando y que se ha conseguido llegar a la meta con el mayor éxito jamás conquistado. Unas lágrimas que no olvidaremos jamás los barcelonistas porque todos los culés lloramos con Pep Guardiola. Fueron lágrimas compartidas, fueron lágrimas de leyenda. Lágrimas de que se ha conseguido lo que nadie en la vida podrá superar.

¡Gracias Barça i Gracias Josep Guardiola!.

¡Visça Barça i Visça Catalunya!